La hija de mi madre ya ha sufrio lo que se le tenía designao

y una se quiere un poco, para no autoinmolarse...

domingo, 27 de junio de 2010

Las mujeres que aman demasiado

...


Una relación adictiva dismuninuye la capacidad de una persona para prestar atención a otros aspectos de su vida y para ocuparse de los mismos.
Usamos nuestra obsesión con los hombres que amamos para evitar nuestro dolor, nuestro vacio, miedo y furia. Y samos nuestras relaciones como drogas, para evitar lo que sentiríamos si nos ocupáramos de nosotras mismas. Cuanto más dolorosas son nuestras interacciones con nuestro hombre, mayor es la distracción que nos proporcionan.
No tener un hombre en quien concentrarnos es como suspender el consumo de una droga, a menudo con muchos de los síntomas físicos y emocionales que acompañan la verdadera suspensión de una droga.
En un esfuerzo por aliviar estos síntomas, volvemos a nuestra última pareja o buscamos una nueva con desesperación.





...